Alisa, una joven ucraniana, cargó a su perrita Pulya, de 12 años, por 17 kilómetros huyendo de los ataques rusos. Nos aconsejaron que dejáramos a los perros, pero son parte de nuestra familia. Mi perra vivió todos los momentos felices y tristes con nosotros, dijo.

Andrea Cisternino es italiano y vive en Kiev, Ucrania, ha comunicado a través de sus redes que no va a hacer abandono de su refugio que alberga a más de 400 animales, entre perros, gatos, caballos, vacas, cabras, patos, gallinas y otras especies.