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Carmen Gloria Bresky "Los gatos son muy apañadores"

Chumi y Carmen Gloria Bresky | Gonzalo Muñoz - Mestizos Magazine

En medio de su trabajo en Sabingo (CHV), y de las grabaciones de una película, nos abrió las puertas de su hogar para conversar sobre su relación con los animales y cómo la han marcado en su vida. Está convencida que quiere envejecer acompañada de perros y gatos.

No se define ni perruna o gatuna, en términos de preferencias y lo evidencia. Carmen Gloria nos recibe en su casa con Akira, una cachorra de 8 meses, que fue rescatada y adoptada en Valparaíso. La actriz nos cuenta que siempre ha sido cercana a los animales, tuvo desde pequeña y era amiga de los perros de sus vecinos. "En esa época pasaba la perrera y se llevaba a los que estaban en la calle. Yo vivía frente a una plaza y los perros salían de sus casas y se juntaban a jugar. Pasaba la perrera, los agarraba y yo gritaba como loca que los dejaran sueltos, que eran de mis vecinos. Como era menor de edad mi mamá me acompañaba a buscarlos, los llevaba a mi casa, los bañaba y los iba a dejar a sus casas".

Su relación con los gatos comenzó cuando era adolescente, recuerda que tuvo a Cochina, una gata negra que parió gatitos en su clóset. "En ese tiempo yo había tenido a mi hijo, porque fui mamá adolescente. Entonces, mi hijo estaba en la cuna y ella estaba en mi clóset con sus guagüitas. Esa fue mi primera gata importante". 

La historia de Atuna, su segunda gata amada, parte un día que fue a dejar a su hijo al jardín infantil, cuando venía de vuelta sintió unos maullidos. "Era una gatita chiquitita, estaba en la calle, tenía como tres semanas. Estaba escondida detrás de unos matorrales, la agarré, la adopté y vivió conmigo 20 años". 

Atuna Carmen Gloria Bresky

                                                                                               Atuna

¿Cómo fue compartir 20 años con ella?

Fue tan importante para mí que decidí tatuármela. Ella me acompañó en todos mis cambios de casa, en el crecimiento y nacimiento de mis otros hijos. Era súper tierna, sana, muy outdoor, le gustaba estar en los árboles. Era súper regalona y apegada a mí dormía conmigo, súper fiel a mí, mientras más viejita más le gustaba regalonear. Sin duda la sentía como una guardiana protectora de energías y de todo. Me la tatué en el antebrazo para tenerla para siempre conmigo, porque sentía que me protegía y que me amaba. Ella valía ese lugar en mi piel por todos los años que me acompañó, que me vio crecer, de ser una madre joven a una madre que después tuvo otros hijos, que me casé. Ella me acompañó en todo ese proceso.

Hoy tiene a Chumi, una gata de siete años que llegó a vivir a su casa, en medio de la pandemia, junto a su hijo mayor, quien también decidió adoptar a Akira y regalársela a Carmen Gloria para Navidad, tras la partida de su perrita Yuma, quien falleció debido a un cáncer. 

Carmen Gloria y Chumi Gonzalo Muñoz - Mestizos Magazine

                                                                                                                                   Carmen Gloria y Chumi                                                                                                                                          

Cuando llegó Chumi estaba Yuma y Mambo (ambos fallecieron), ella no estaba acostumbrada a compartir con otros perros, por lo que en un comienzo era más arisca.  "Al principio dormía con mi hijo, pero empezó a subir a mi dormitorio, se acostaba en mis pies y comenzó a adueñarse del espacio. Llegó a una casa nueva, donde había un perro grande, después llega otro perro grande, entonces ella siempre está en altura, le gusta estar arriba del refrigerador, aparece por los balcones y no se relaciona con la Akira. Tiene una personalidad en que es arisca, pero cariñosa. Si te ve sola, te hace unos bailes en el suelo, se da vuelta y es muy tierna, pero si hay más gente o llega la Akira se va altiro. Entonces a ella le gusta estar en el patio, en los árboles, siempre en altura".

¿Eres su mamá?

Claro, la Chumi te mira con una cara media engreída, con un ojo a media asta, y quizás no te va a pescar mucho, pero igual está. Está pendiente de todo, cuidando la casa, está contigo, te mira a los ojos. Hay momentos en que busca contacto, quiere jugar, también necesita atención, los gatos se sienten seguros cerca de su familia.

Confiesa que siempre ha sido muy cercana a los perros. Hiroshi fue su primer perro de adulta, estaba recién casada. "Era un Akita, fue un perro hermoso, súper guardián", recuerda. Cuando falleció Hiroshi llegó Yuma.

Hiroshi Carmen Gloria Bresky

                                                                                              Hiroshi

"Todos mis animales son hijos para mí, pero con ella en especial tenía una relación muy apegada, muy cercana. Era realmente mis ojos. Si me iba a la playa la llevaba, a cualquier parte que yo iba, ella me seguía, éramos muy regalonas. Lamentablemente, el año pasado le dio cáncer, fueron como tres meses terribles donde la operé, le saqué un tumor de la guata, fue todo bastante doloroso y desgastante. Di la lucha con toda mi fuerza y con toda mi fe, pero finalmente no se logró, tenía metástasis. Estaba cada vez peor hasta que llegó el momento en que tuvimos que hacerla descansar, dejó de comer y no se iba a recuperar". Tenía 9 años cuando murió. Una mestiza, mezcla de Rodesiano con Weimaraner. "Era hermosa, exquisita, elegante, Yuma Versace le decía. Éramos cómplices, salíamos a pasear, íbamos a la playa, dormía en mi cama. Se creía un perro chico y se metía entre las sábanas".

Yuma Carmen Gloria Bresky

                                                                                                  Yuma

¿Cómo viviste el proceso de su enfermedad? Descubrir que tenía cáncer...

Estaba haciendo una función de teatro en Concepción. Mi hijo me contó que estaba vomitando, llegué, la llevé al veterinario, le hicieron exámenes, una ecografía, y descubrieron que tenía un tumor grande. Cuando me dieron esa información, me fui a la mierda, no tengo otra palabra. No podía creer que mi hija pudiera tener un posible cáncer o una enfermedad grave. Me dijeron que la operación era complicada. Cuando la operaron estuvo como cuatro días hospitalizada y es súper terrible dejar a tu perra ahí, no sabes qué va a pasar. La íbamos a ver, le llevábamos su comidita especial. Sabes que lo pienso y todavía me angustio. Fue muy terrible... Ahora, en agosto, se cumple un año de su muerte, fue muy terrible y doloroso. Sé que la comparación a muchos le va a parecer absurda, pero pienso en todas esas mamás que luchan con sus hijos con cáncer y es como ¡guau! Es feroz. Cuando la dormimos fue un momento muy bonito porque participaron mis hijos también, nos pudimos despedir con musiquita y la enterramos acá, en mi patio, junto a Hiroshi y la Atuna. 

Dormirlos es un acto de amor...

Sí, además que los perros no se quejan, tú sabes que están con dolor y quizás ella no se iba porque sabía que me iba a doler mucho. Ella me leía, teníamos una relación muy cercana, muy cómplice. Fue muy terrible todo ese periodo, todavía no me recupero, esta muerte me devastó (se emociona). 

La llegada de Akira

Dante, su hijo mayor, sabía que Carmen Gloria estaba triste, ella les había dicho que no iba a tener más perros porque sufría mucho cuando fallecían. "En Navidad, mi hijo decidió regalarme una perrita, la fue a buscar a un refugio en Valparaíso. Estábamos celebrando con mi familia, mis hijos, mi nieto, mi papá. Y me dice, que vaya a buscar a mi pieza un regalo, que es grande. Voy, siento un ruido y aparece una cosa chica, la miro, la tomo en brazos y me empieza a lengüetear la cara. Le digo que no estoy preparada, pero no pude negarme. Si bien no estaba preparada para tener otro perrito, uno tiene incorporado ser mamá perruna y mamá gatuna".

Akira y Carmen Gloria Bresky Gonzalo Muñoz - Mestizos Magazine

                                                                                                  Akira

Agrega que, "con la Akira llevamos como 8 meses juntas, y ella me robó el corazón también. Es regalona, loca, es muy distinta a la Yuma, pero vino a sanar un corazoncito herido. Al principio estaba media reacia a entregarme tanto. Le iba a dar la comida, pasearla, pero no con ese corazón realmente entregado a amar, pero es imposible (ríe). A veces la llamo y le digo Yuma, cosas que uno no quiere que pasen, pero había que cumplir un ciclo de duelo, que se aceleró un poco con esta cachorra loca, cariñosa, que se porta pésimo, a veces, pero me da alegría. Es mi compañía, está conmigo, duerme conmigo y es una regalona que vino a robarme el corazón".

¿Cómo se porta?

Rompe cargadores, zapatos, confort, ama el confort, entonces hay que dejar todo en altura, mantener las puertas cerradas. Cuando uno la deja en el patio se la ingenia para entrar, escala como gato y entra por la ventana. Me ha costado que aprenda a hacer pipí afuera ¡Qué lata! es como ya estoy vieja para estar criando una guagua de nuevo (ríe). Rompe adornos, calcetines, pantuflas, aunque tenga sus juguetes, obviamente igual siempre va a ser atractivo lo otro. Tenía plantas bonitas, nuevas, comenzó a hacer hoyos, a morderlas, pisarlas. Entonces hay que ir cambiando las cosas a una altura que ella no pueda llegar, pero se las ingenia igual. 

Akira y Carmen gloria Gonzalo Muñoz - Mestizos Magazine

¿Eres más gatera o perruna? 

No puedo escoger, me encantan los dos. En un momento te habría dicho que era más gatuna, pero en verdad, no, el perro también me fascina. En la calle saludo a los perros y a los gatos. Mi vida a futuro, de vieja, siempre la veo con un perro y un gato. 

A los gatos se les atribuyen propiedades místicas y sanadoras...

Los encuentro muy inteligentes y sin duda tienen algo más místico. Yo sentía que cuando mi gata se acercaba a ronronearme, que con su ronroneo me estaba limpiando mis angustias, preocupaciones, percibía perfectamente mi estado. Creo que los perros también, pero el gato tiene una cosa muy sanadora. Cuando yo estaba con angustia y no podía dormirme llegaba la Atuna y se ponía a ronronear arriba de mi pecho. Estando embarazada le ronroneaba a mi guata, les ronroneaba a mis hijos.

También dicen que son maestros y transmutan el dolor en amor...

Tal cual, opino lo mismo, eso es. Lo creo totalmente, cuando estás pasando por algo son súper apañadores, están cerca tuyo y empiezan con el ronroneo. Más allá de que me dio pena despedirme de la Atuna, por eso me la tatué, es por el significado que tiene. Muchas veces cuando tengo que hacer algo, como la tengo en el antebrazo, le doy un besito, así como invocando su presencia cuando necesito valor o fuerza. Es como un ¡vamos!, por ejemplo, antes de entrar al escenario.

Chumi Gonzalo Muñoz - Mestizos Magazine

                                                                                                                                                                 Chumi

¿Ves a los animales como hijos? 

Son mis hijos, son parte de mi familia. Creo que tienen una energía maravillosa, súper sanadora. La mirada de los animales me transmite su alma, son puros, bondadosos. Me emocionan, admiro desde su belleza a cómo son, su naturaleza, los rasgos particulares que tienen cada uno. Me encantan.  

Tenencia responsable

Carmen Gloria invita a las personas a relacionarse con los animales desde el amor y la responsabilidad. "Estos seres nos entregan tanto cariño, lealtad, protección, dulzura y alegrías, porque con sus locuras nos hacen reír. Entonces merecen una relación sana, responsable afectivamente y en lo práctico. Que los saquen a pasear, que estén en un buen lugar, abrigaditos si van a estar en el patio, tratarlos como merecen y todo va a ser todo retribuido. Y si alguien no tiene esa intención o ese tiempo, entonces, mejor que no los tenga".

Funeral Petfriendly

La actriz dice que, "cuando me muera, quiero que vayan a mi funeral todos los perros que quiero, no solo los míos. El perro de mi amiga, todos los perros que conozco, porque cuando voy a sus casas, a veces también les llevo regalos. Quiero que estén todos los animalitos que sé que me han querido y me han amado. Así de cercana me siento a ellos, que vayan mis amigos con sus animales. Y me van a estar esperando todos: Hiroshi, el Mambo, la Yuma...

Carmen Gloria y Akira Gonzalo Muñoz - Mestizos Magazine

                                                                      Carmen Gloria y Akira

Proyectos

Carmen Gloria está trabajando en Sabingo (CHV). "Me toca viajar y hacer distintas secciones. Hice la película ´Conejillos´, con Boris Quercia, que debería estrenarse el próximo año. Ahora, el 21 de agosto, se estrena la película ´Me rompiste el corazón´, que es sobre el amor de Roberto Parra y la Negra Ester, yo hago a la Negra Esther, también es con Boris Quercia. Además, retomo proyectos de teatro que son remontajes. Desde agosto estoy con el musical ´La Incondicional´, que cantamos canciones de Luis Miguel. Luego, ´Cecilia: el musical´. Después continúo con el musical ´Provócame´, que son canciones de Chayanne; y ´Tú eres la tristeza de mis ojos´, que ahí cantamos canciones del Divo de Juárez, Juan Gabriel. Así que estoy full teatro hasta fines de octubre, noviembre. Así también, estoy participando en una película italiana, que se grabó en el norte de Chile, y ahora me voy a Italia a terminarla".

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